El ministro de Deportes, Mischo, da la alarma: ¡el regreso de Rodrigues provoca un escándalo!

El ministro de Deportes, Mischo, da la alarma: ¡el regreso de Rodrigues provoca un escándalo!

Recientemente, el Ministro de Deportes de Luxemburgo, Georges Mischo, criticó claramente al seleccionador nacional Luc Holtz. El motivo es el regreso propuesto del jugador condenado Gerson Rodrigues a la selección nacional y la exclusión del periodista Julien Mollereau de “Le Quotidien” de Holtz. Según wort.lu, Mischo calificó la exclusión de inaceptable porque se basó en preguntas legítimas del periodista. Mischo tiene previsto reunirse con el presidente del FLF, Paul Philipp, para aclarar sus valoraciones.

En una entrevista, Philipp explicó que no hubo ninguna conversación con Mischo después de la nominación de Rodrigues. Rodrigues está activo a pesar de su sentencia confirmada de prisión de 18 meses por múltiples agresiones, incluida violencia doméstica. Todavía puede jugar en la selección de la FLF, lo que Tageblatt.lu considera problemático. La situación ha sometido a la FLF a críticas y presiones masivas.

Reacciones a la nominación

La nominación de Rodrigues no sólo desencadenó implicaciones en materia de política deportiva, sino también un acalorado debate social. El Partido Socialista Obrero de Luxemburgo (LSAP) pide consecuencias al Comité Olímpico (COSL) y al Ministerio de Deportes. Acusa a la FLF de apoyar la violencia contra las mujeres al nominar al jugador condenado. Además, la diputada del PD, Mandy Minella, pide un modelo a seguir en el deporte y una señal clara contra la violencia.

En el debate político también se consideró inapropiada la afirmación de Rodrigues: “Sólo Dios puede juzgarme”. Minella exige una disculpa pública al jugador. El Partido Pirata de Luxemburgo también criticó duramente y exigió una disculpa del FLF a Mollereau.

La libertad de prensa en el punto de mira

Mischo enfatizó la importancia de la libertad de prensa, mientras que Holtz describió el debate público como “muy exagerado”. Estas declaraciones se enmarcan en un contexto más amplio en el que la Federación de Fútbol (FLF) y el seleccionador nacional se ven sometidos a una presión cada vez mayor. Las decisiones futuras sobre este asunto, así como las reuniones entre Mischo y Philipp, podrían ser decisivas para la postura de la FLF y el tratamiento de los jugadores con antecedentes penales.