Los vehículos eléctricos conquistan Westerwald: ¡las empresas actúan ahora!

Los vehículos eléctricos conquistan Westerwald: ¡las empresas actúan ahora!

Existe una clara tendencia hacia la electrificación de las flotas de vehículos en la economía alemana. Las empresas de Westerwald y del suroeste del Palatinado apuestan cada vez más por los coches eléctricos. Alto autofleet.de El objetivo es claro: aumentar el número de vehículos eléctricos en los hogares privados mediante incentivos internos. Un pionero en este ámbito es Boehringer Ingelheim, que prevé que tres cuartas partes de sus vehículos de empresa sean eléctricos de aquí a 2030. Actualmente, la empresa cuenta con más de 100 puntos de carga para vehículos eléctricos e híbridos en sedes alemanas.

La empresa química BASF también opera en el ámbito de la movilidad eléctrica y ya ha convertido el 55% de sus aproximadamente 1.600 vehículos de empresa en vehículos eléctricos o híbridos. En colaboración con Pfalzwerken, se creó en Ludwigshafen una infraestructura de carga eléctrica para apoyar el cambio a los vehículos eléctricos. Los incentivos financieros dentro de la directiva sobre vehículos de empresa tienen como objetivo promover el uso de vehículos eléctricos. Renania-Palatinado podría tener un potencial de ahorro de hasta 249 millones de euros gracias a los vehículos eléctricos.

Promoción y retos de las infraestructuras de recarga

Sin embargo, no se deben subestimar los desafíos que plantea la expansión de la movilidad eléctrica. El gobierno federal se ha fijado objetivos claros de protección del clima y aspira a tener 15 millones de coches eléctricos de batería en Alemania hasta 2030. oeko.de. Sin embargo, el subsidio para los vehículos eléctricos se redujo a partir del 1 de enero de 2023 y se canceló por completo para los propietarios comerciales a partir del 1 de septiembre de 2023. Esto podría frenar la dinámica de la electromovilidad.

Un obstáculo clave para ampliar la infraestructura de carga son los diferentes perfiles de movilidad de las flotas de las empresas. Los diversos requisitos para las opciones de carga plantean desafíos para las empresas, especialmente en lo que respecta a la propiedad y los requisitos técnicos. Es fundamental ampliar las soluciones de sustitución, como las estaciones de carga públicas y la infraestructura de carga en el hogar y en la empresa.

Eficiencia de costes mediante el uso de su propia electricidad.

La combinación de carga pública y carga propia optimizada para energía fotovoltaica podría suponer un ahorro de casi 250 millones de euros en Renania-Palatinado. Los costes de carga también juegan un papel importante: mientras que la electricidad de la red cuesta 30 céntimos por kWh, la propia electricidad fotovoltaica sólo cuesta 6 céntimos. Esto hace que la carga en las estaciones de carga públicas sea menos atractiva a un precio medio de 68 céntimos por kWh, especialmente en comparación con el combustible diésel a 1,38 euros por litro, lo que supone unos costes anuales de más de 536 millones de euros para las flotas diésel en Renania-Palatinado.

El paso a los vehículos eléctricos demuestra que los fabricantes alemanes ganan cada vez más terreno en el segmento de los vehículos eléctricos. Sin embargo, la empresa Debeka, que opera una flota más pequeña, afirma que el ahorro es menos relevante para ellos. Sin embargo, las empresas son impulsoras clave de la movilidad eléctrica, ya que los vehículos de empresa tienden a ser reemplazados más rápidamente que los vehículos privados.

El desarrollo actual de la infraestructura de carga y el progreso en el segmento de los vehículos eléctricos podrían influir significativamente en las tendencias futuras y en la movilidad en su conjunto. La combinación de estas innovaciones y el marco político son cruciales para lograr los objetivos climáticos y seguir avanzando en la electromovilidad.